sábado, 12 de mayo de 2007

Tren a las nubes

Finalmente llegamos a Salta capital de noche. Era viernes, así que nos dimos una vuelta por una peña de Balcarce, la calle en la que se concentra toda la movida nocturna de bares y entretenimiento. Fuimos a la Vieja Estación y después a tomar unos tragos a un pub con amigos.

Al otro día, bien tempranito, a las siete en punto de la mañana pasó a buscarnos la combi para realizar la excusión del Tren a las Nubes. Iríamos por la ruta en parelelo a las vías del tren.

Un viaje alucinante. Altamente recomendable. De ida son más de 4 horas de recorrido por una ruta de ripio, que luego se hace de pavimento y luego de ripio otra vez. Hay para todo los gustos: puna, cornisa, ruinas, estaciones de tren, casitas de adobe con sus corrales de piedra y/o guano, pueblos perdidos y alejados de todo.

En este foto se puede ver el puente más largo de todo el trayecto del tren.
Colores para todos los gustos.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Diego, si el de la foto sos vos, lamento no haberte cruzado en mi viaje...Tu sombra promete, y tu andar refleja el largo camino de la introspección.
Siga su paso MOROCHO, le dije q acompañaría algún que otro pensamiento...

Beso,

Grabriela M.

Anónimo dijo...

Encontro el norte o sigue sin rumbo? GM

Anónimo dijo...

Sì, un poco lo encontré. Aunque el norte es muy movedizo.